Después de tanto estar en el banco de la paciencia
hoy irrumpe mi llanto…
llanto de inmenso desconsuelo…
con ese dolor que atraviesa la existencia…
ese que no quería que saliera, pues sabía que ese día sería de clausura…
sabía que ese día bajaría mis velas…
Fueron tantos los tiempos en que dejé mi lagrima por ti en un rincón guardada…
azarosa en un afán de que mi corazón no la percatara…
y aunque nunca quise ofrecerla, hoy si mi bien…
hoy llora mi alma y mi vida y mi amor y mi calma…
hoy lloran todas juntas sin tardanza…
hoy se desborda todo mi sentir en estas lagrimas que no has de volver a mirarlas…
sólo por hoy amor... sólo por hoy.
Hoy te devuelvo el corazón, ese que una vez me regalaras…
ese que volaba por aquí en rumbo fijo a mi mirada...
te lo mando en primera clase como te lo prometí…
y los pedazos del mió…
bueno…
eso los empiezo a recoger mañana…
el tiempo los irá pegando hasta quedar de nuevo como estaba…
Y es que ya se me agotaron las pausas…
hoy busqué desesperadamente una y no la halle…
y desde ese momento no ha dejado de caer una lágrima…
Por eso he decido devolverte el corazón…
hasta hoy con el manto de mi abrigo lo guardaba…
seguro al recibirlo aún lo encontrarás tibio…
y es que si no te lo devuelvo el mío se me apaga…
Te agradezco amor por todo lo dado…
por los sueños y las ilusiones…
y es que si prosigo mi tormento me estaré haciendo mucho daño…
y no hallo tu respuesta, mi ternura… no la hallo….
No hay distancia que salve este abismo que hoy nos separa…
deja que recoja el sentimiento… que sane mi vivir…
entonces amor mío, sólo entonces…
podré saber de tu existir.
