Divagando en mis miserias

En la playa… mis ojos húmedos… enciendo un cigarrillo y me asomo al balconcito con toda la intención de permitirme unos minutos de miseria absoluta… el cigarro se consume en un alternar de dedos y boca… y la ceniza se dirige en caída libre hacia el suelo… me percato que pasa alguien… pienso… en estos momentos mi hija me diría en tono de alerta maternal –“mami… y sí es un viejito y le quemas el coquito… o un inconforme con bisoñé y se le incendia?… una sonrisa de susto travieso se dibuja en mi rostro… esas ocurrencias suyas… si… así es ella… pensé con nostalgia de no tenerlas cerca… una bocanada de humo me recuerda el motivo… sumergirme en la miseria… una mirada a lo magno y misterioso del mar me hace pensar en el tiempo y la distancia… qué jugada las que nos hace la lejanía… buen punto para la meta planteada… y suspiro… cuándo te veré?... suspiro… como por arte de magia y sin salir de mi asombro por aquello de la hora, diviso un par de viejitas caminar por la playa… en silencio… disfrutando el momento… y pienso… qué belleza!!... así nos iremos a ver mi gran amiga y yo algún día?... en los atardeceres de mi vida cuando el sueño de mi casita en la playa se vea cumplido… no… con mi gran amiga no... ella es muy tranquila y yo quiero fiesta... me sonreí… recordé el punto de la miseria… me dije: enfóocate mujer… recordé… en 2 días a trabajar… con la gorda esclavista y la asistente nube gris… cómo permito que lidie con mis niños si lleva un yunque en su vivir… pienso… ahhhh!!! mis niños… mis dulces y traviesos enanos… recordando sus caritas evoco sus risas, sus diabluras y sobre todo sus abrazos… cómo me nutren esos bracitos… de nuevo… no te estás enfocando… hora de otro cigarro… enciendo… pienso: cuándo tendré la voluntad de dejarlo? mirándolo fijamente como sí él fuera el responsable… vergüenza de ti mujer… jum… buen punto para mi meta… apalear mi autoestima… recuerdo… demonios!!... tengo que preparar el taller… qué ejercicios utilizaré esta vez?... haré el dibujo aquel que me queda tan genial… definitivamente gracias a Dios por mis manos… uyyy me las tengo que arreglar en lo que regrese… de nuevo me enfoco… recuerdo la humedad primera en mis ojos… regresa de nuevo tu rostro… de nuevo la nostalgia… tus ocurrencias… me río… lloro tu ausencia… secando una lágrima me percato… oh oh no me he echado la humectante… mucho sol para mi cara… me voy a poner vieja antes de tiempo… suspiro… que vaina con mi mamá y sus achaques… ajajaja si supiera que vino a mi mente con la palabra vieja… me mata… recuerdo… mis miserias… desisto… todo lo que me ofrece la vida… y yo que sólo quería sentirme miserable… las hormonas… siiii son las hormonas… al final llego a la conclusión de que nada mejor como dejar divagar el pensamiento para convertir en sonrisa la depresión… al diablo las miserias…